La Guardia Urbana de Barcelona, desalojó el pasado domingo una fiesta ilegal dentro de un «sex shop» en el Eixample de Barcelona, en la que había 65 personas, incumpliendo diversas de las restricciones por coronavirus.
La policía municipal, que detectó la celebración alertados por varios vecinos, se presentó a las 21.00 horas, en el local. Según BTV, el local está situado en la calle de París.
Como resultado de la actuación, se interpusieron 61 denuncias de infracciones por no respetar las medidas contra el covid, nueve denuncias administrativas en el local y se levantó un acta por drogas.