El Ayuntamiento de Barcelona extiende la prohibición de las llamadas rutas de alcohol a toda la ciudad y durante todas las horas del día. La decisión aprobada tiene una vigencia de 4 años y prohíbe organizar, vender, publicitar o realizar itinerarios con el fin de consumir alcohol.
Hasta ahora, esta actividad ya se había restringido en los distritos de Ciutat Vella, desde 2012, y del Eixample desde el 1 de junio de este año. En ambos casos quedaba prohibido en horario nocturno, entre las 19.00 y las 7.00. Esta actividad se ha extendido a cualquier hora del día, y en concecuencia se ha decidido ampliar la prohibición a las 24 horas .
Esta práctica se conoce como «pub crawling», y está dirigida a grupos de turistas jóvenes. Consiste en promocionar el consumo de bebidas alcohólicas a través de un recorrido por una serie de bares adheridos a una oferta de precios.
Normalmente, se consumen varias bebidas de forma relativamente rápida, lo que causa molestias entre los vecinos y genera problemas en el espacio público, y puede derivar en delitos o infracciones de seguridad vial.
Desde la Guardia Urbana de Barcelona explican que los responsables de las rutas se enfrentan a multas que pueden llegar hasta los 900 euros , además de otras sanciones que puedan derivarse, como las molestias a los vecinos o el consumo en la vía pública.
P
