La línea L5 del metro de Barcelona ha vivido otra escena en la que una vigilante del Metro se enfrenta a un pasajero que no se quiere poner la mascarilla. Cuando el pasajero se niega a salir, el altercado continua con la vigilante arrojando la mochila del pasajero al andén, de la estación de Can Boixeres de L’Hospitalet, ante la pasividad del hombre, que ni siquiera sale a buscarla.
La mujer le insiste una y otra vez en que se ponga la mascarilla al hombre, que se niega a hacerlo. Entonces le pide que abandone el vagón y se niega también, lo que motiva que la vigilante le coja la mochila y la lance fuera del vagón. Ni en esas circunstancias el hombre le hace caso. Los vigilantes de los transportes públicos se encuentran a diario con situaciones más que complicadas por la violencia y el vandalismo de algunos usuarios.